Harari comenzó hablando sobre las protestas que se llevaron adelante este miércoles para evitar que se jugara el partido entre River y Junior de Barranquilla.
«Esta protesta terminó con una represión feroz y gases lacrimógenos que incluso llegaron al estadio y se tuvo que parar el partido porque el gas llegó al campo de juego. Eso muestra la voluntad del gobierno de Iván Duque de reprimir como sea», dijo.
«Los datos sin difíciles de recolectar con precisión, pero tenemos más de 100 muertos y se reportan alrededor de 100 desaparecidos que no volvieron a su casa después de las manifestaciones y tampoco se reporta su detención o muerte», señaló.
«Hasta el 2019, Colombia aparecía en las noticias por el narcotráfico o la guerrilla de las FARC, lo que no significa que no hubiera otro tipo de protestas», explicó.
«Históricamente se ejecutó a líderes sindicales, tal es así que solo el 5% de su fuerza laboral está sindicalizada. Colombia vivía una especie de paz social en cuanto a la cuestión económica y a las protestas de la población, simplemente porque se eliminaba a sus dirigentes«, explicó.
«Eso estalló porque este caso se fue incubando, pero tuvo un punto de llegada con una acentuación del ajuste, producto de una crisis económica y fiscal, que tiene como elemento distintivo la caída de los commodities y del precio del petróleo, la pérdida de peso en el mercado mundial en el caso del café, la pérdida de una relación firme con EE.UU y Venezuela, que aparecía como una válvula de escape para un complejo muy pequeño industrial y agrario, para la exportación de productos que no iban al mercado mundial y empieza un ajuste fiscal muy fuerte», detalló.
«El primer paro nacional se realiza en 2019. La pandemia agrega algo más porque Iván Duque está a favor de abrir absolutamente todo y que se mueran los que se tengan que morir. Eso generó una rebelión«, recordó.
«Lo que estamos observando es una primera rebelión en la pandemia y pos pandemia, contra el manejo de la misma«, indicó.
Sobre la reforma impositiva mencionó que «las protestas siguen porque el pliego de condiciones de la protesta es que se retire la reforma impositiva, de salud y laboral».
«Quedó muy claro que la pandemia postergó las movilizaciones. En América Latina, los gobiernos utilizaron la pandemia para llevar adelante un ajuste muy importante, más allá del propio ajuste que implica el desmanejo de la pandemia y que no pudo ser respondido porque se congeló la lucha. Colombia acaba de descongelar los conflictos, es un espejo del futuro de varios países de América Latina«, afirmó.
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